La ignorancia del poder.

Los fariseos que gobernaban Israel en tiempos de Jesucristo decían creer en el Dios de Abraham, jactándose de ser descendiente de este patriarca a quien conocían como amigo del Creador. No obstante, teniendo en sus manos una cuota importante del poder económico, porque los romanos poseían la mayor parte; pero los fariseos también tenían pleno control de las mentes de la inmensa mayoría de la población judía, aún así sentían temor de perderlo todo al escuchar las palabras de Jesús y ver como el pueblo le seguía cada vez con mayor entusiasmo. Al final lo llevaron ante Pilatos y lograron una condena de muerte para aquel hombre de su propio pueblo al que no podían probarle un solo delito ni demostrar que hubiera cometido pecado alguno. Estamos hablando de alguien a quien el pueblo judío esperaba desde mucho tiempo atrás, debido a que las escrituras en que ellos basaban su fe y mediante la cual ejercían la justicia, anunciaba la llegada del Mesías redentor del pueblo de Israel, ¿por qué lo rechazaban con tanta crudeza y crueldad? La respuesta es la ignorancia. No un tipo d ignorancia de las que poseen los iletrados o analfabetos que nunca han estudiado ni la ignorancia que cualquiera tiene por no haber tenido contacto con un conocimiento específico y por consiguiente ignora lo referente a ese tema. La ignorancia de los fariseos, expertos en las leyes de Israel, era provocada por el miedo que sentían a perder el poder que ostentaban entre la gente de su pueblo, ellos temían que la gente dejara de buscarlos y desobedecerlos por haber encontrado un camino diferente al que ellos representaban. Estaba escrito que así sucedería. Hoy sucede exactamente lo mismo con los poderosos que gobiernan al mundo, ellos tienen tanto miedo a perder el poder, que invierten todo su dinero en buscar la forma de mantener la desigualdad entre las denominadas clases sociales de la sociedad mundial y en procurar que la gente común y corriente no tenga acceso a la educación, la salud ni a ningún tipo de recurso que pudiera significar un avance cualitativo en sus estilos de vida, porque ellos tienen miedo a que los pobres del mundo se den cuenta de que pueden llegar a eliminar las diferencias entre los hombres solamente con elevar sus niveles de conciencia. Cuan ignorantes son los poderosos que creen que alcanzarán la vida eterna ejerciendo la explotación de sus semejantes. Mientras tanto siguen rechazando a Jesús.