El tema del
celibato, adoptado por hombres que sirven a Dios, ha generado diversas
opiniones en los últimos tiempos. La Biblia nos muestra que, aunque no todos
los hombres seríamos capaces de elegir ese camino, sí, en verdad es una virtud concedida a
ciertos hombres el que puedan consagrar sus vidas a servir exclusivamente a
Dios sin contraer matrimonio. Los siguientes pasajes bíblicos están en el
capítulo 19 del libro de Mateo, versión Reyna - Valera.
3 Entonces los fariseos se acercaron a él para
probarle, diciendo:
-¿Le es lícito al hombre
divorciarse de su mujer por cualquier razón?
4 El respondió y dijo:
-¿No habéis leído que el
que los creó en el principio, los hizo varón y mujer? 5 Y
dijo: "Por esta causa el hombre dejará a su padre y a su madre, y se
unirá a su mujer; y serán los dos una sola carne." 6 Así
que ya no son más dos, sino una sola carne. Por tanto, lo que Dios ha unido, no
lo separe el hombre.
7 Le dijeron:
-¿Por qué, pues, mandó
Moisés darle carta de divorcio y despedirla?
8 Les dijo:
-Ante vuestra dureza de
corazón, Moisés os permitió divorciaros de vuestras mujeres; pero desde el principio
no fue así. 9 Y os digo que cualquiera que se divorcia de su mujer,
a no ser por causa de fornicación, y se casa con otra, comete adulterio.
10 Le dijeron sus discípulos:
-Si así es el caso del
hombre con su mujer, no conviene casarse.
11 Entonces él les dijo:
-No todos son capaces de aceptar esta palabra, sino aquellos a quienes les
está concedido. 12 Porque hay eunucos que nacieron así desde el
vientre de la madre, hay eunucos que fueron hechos eunucos por los hombres, y
hay eunucos que a sí mismos se hicieron eunucos por causa del reino de los
cielos. El que puede aceptar esto, que lo acepte.
En la edad
antigua u orienttal , el término eunuco se utilizaba para nombrar a los
funcionarios favoritos del rey. Aquí vemos como Jesús dice que el poder aceptar
no casarse le es concedido a algunos (en otras versiones bíblicas dice que es
un regalo de Dios que se le concede a algunos), y añade que hay hombres que se hacen a ellos
mismos eunucos por causa del reino de los cielos, en clara alusión a aquellos
hombres que prefieren y optan no conocer mujer con el fin de dedicarse a los
asuntos celestiales, a los negocios de Dios. También advierte que esto no todos
pueden llegar a hacerlo pero aconseja a todo aquel que pueda aceptarlo que lo
haga. Está claro que aún aquellos a quienes este poder les es concedido,
también han de hacer uso de su libre albedrío para tomar esa importante
decisión. Cuando él dice que no todos son capaces de hacerlo, se refiere
obviamente a que el hombre tiene por naturaleza la necesidad fisiológica,
mental y emocional de estar acompañado. Jesús responde así a sus discípulos que
dicen que no le conviene al hombre casarse si ha de tener que soportar la carga
del matrimonio durante toda su vida sin tener la opción de divorciarse
acogiéndose a las causas permitidas por la ley de Moisés, entonces Cristo no
afirma que es conveniente no casarse, tampoco lo niega, más bien les indica que
sí existen hombres que tienen esa concesión o ese poder, que pueden hacer
posible el adoptar esa elección de mantenerse castos para dedicarse a Dios y
cuidar a la esposa de Dios que es su iglesia. Esto es que Dios le ha concedido
esa virtud a ciertos hombres. En otras palabras, los discípulos están opinando que
no es fácil para el hombre lidiar con los asuntos del matrimonio sin contar con
la opción de dar a la mujer carta de repudio, es decir, llegar al divorcio, si
esto significa caer en adulterio. En la tradición hebrea la mujer permanecía
subyugada a su marido pues este tenía la potestad de repudiarla si esta
incurría en una falta, una infracción a las leyes del matrimonio o lo
desobedecía de alguna manera. Jesús, en su respuesta, les dice que no todos los
hombres tienen el poder de vivir sin una pareja. de lo cual se deduce que permanecer
solos no es tan sencillo. Jesús lo admite al responder a sus discípulos con el
ejemplo de los que se hacen voluntariamente eunucos para trabajar
exclusivamente en las cosas de Dios, estos hombres recibieron ese poder del
Señor, lo aceptaron y lo hicieron parte cenral de sus vidas. Ejemplos de estos
casos, además de Jesús, serían Juan el
bautista y el apóstol Pablo, quienes no formaron familia sino que dedicaron sus
vidas a los asuntos del Señor.
Nota: Como
dice el escrito, en la antigüedad el término “eunuco”,se utilizaba para
designar a los hombres de confianza de un gobernante, hombres que dedicaban sus
vidas a servir al rey. Por eunuco también se entiende: un hombre castrado,
también como un hombre poco viril o afeminado. Algunos reyes castraban a todos
los hombres que eran destinados a cuidar a las esposas que vivían en su harén.
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