lunes, 7 de abril de 2014

Salmo 135.

Los grandes hechos de Dios

135 1 ¡Aleluya!
¡Alabad el nombre de Jehovah!
Alabadle, oh siervos de Jehovah,
2 vosotros que estáis en la casa de Jehovah,
en los atrios de la casa de nuestro Dios.
3 Alabad a Jehovah, porque Jehovah es bueno;
cantad salmos a su nombre, porque es agradable.
4 Porque Jehovah ha escogido a Jacob para sí,
a Israel como su especial tesoro.

5 Porque yo sé que grande es Jehovah;
nuestro Señor es más que todos los dioses.
6 Jehovah ha hecho todo lo que ha querido
en los cielos y en la tierra,
en los mares y en todos los océanos.
7 El hace subir la neblina desde los extremos de la tierra.
Hace los relámpagos para la lluvia
y saca el viento de sus depósitos.

8 El es quien hirió a los primogénitos de Egipto,
tanto del hombre como del animal.
9 El envió señales y prodigios en medio de ti, oh Egipto;
sobre el faraón y sobre todos sus servidores.
10 El derrotó a muchas naciones
y dio muerte a reyes poderosos:
11 a Sejón, rey de los amorreos,
a Og, rey de Basán,
y a todos los reinos de Canaán.
12 El dio la tierra de ellos en heredad,
en heredad a Israel su pueblo.

13 Oh Jehovah, eterno es tu nombre;
tu memoria, oh Jehovah, de generación en generación.
14 Ciertamente Jehovah juzgará a su pueblo,
y tendrá misericordia de sus siervos.

15 Los ídolos de las naciones son de plata y oro,
obra de manos de hombres.
16 Tienen boca, pero no hablan;
tienen ojos, pero no ven;
17 tienen orejas, pero no oyen;
tampoco hay aliento en sus bocas.
18 Como ellos, son los que los hacen
y todos los que en ellos confían.

19 ¡Oh casa de Israel, bendecid a Jehovah!
¡Oh casa de Aarón, bendecid a Jehovah!
20 ¡Oh casa de Leví, bendecid a Jehovah!
¡Los que teméis a Jehovah, bendecid a Jehovah!
21 ¡Bendito sea Jehovah desde Sion!
¡El mora en Jerusalén! ¡Aleluya!

No hay comentarios:

Publicar un comentario